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Mujer que sabe latín...

Emma Jiménez Llamas

En este mes de marzo, volvamos la mirada a una escritora ya clásica de las letras mexicanas y elijamos de entre su vasta obra un título que probablemente resultaba provocador cuando se publicó por primera vez (en 1973), y que ahora evoca mil batallas compartidas (no todas ganadas) por las mujeres y las escritoras.

Mujer que sabe latín...* Abrimos el libro ávidos de saber cómo va Rosario Castellanos** a completar el adagio con el que se pretendía desalentar en las mujeres el ejercicio de la lectura y la escritura: Mujer que sabe latín... ni encuentra marido ni tiene buen fin.

En el índice seguimos las pautas que ha dejado la escritora y nos detenemos en uno de los 35 breves ensayos que ahí aparecen: "La mujer ante el espejo: cinco autobiografías"(pp. 41-45), de donde salta de inmediato Santa Teresa(1), quien 'de los coloquios con la divinidad', afirma Castellanos, aprende lo que después formularía Valéry: 'que del mayor rigor nace la mayor libertad'.

Sin más división que un punto y aparte, Castellanos dedica dos párrafos a Sor Juana Inés de la Cruz(2), cuyo camino, dice, no es 'de santidad, sino método de conocimiento'. La equipara con Judith, posible hermana de Shakespeare, que, de haber existido, habría sido sacrificada por las convenciones de la época, según fue imaginado por Virginia Woolf.

De Virginia Woolf(3) indica Castellanos que fue capaz de aprehender la totalidad en el instante y traducirlo a la palabra poética. Para entonces ya había entrado Woolf en posesión de lo que sus antecesoras 'ambicionaron sin alcanzar: una habitación propia'.

La palabra como instrumento para orientarse en el mundo. Así se servía Simone de Beauvoir(4) del 'verbo que es carne, que es acto, que es entendimiento y que perdurará como memoria' añade Castellanos; y concluye que la escritora francesa hubo de pagar un alto precio por convertirse en escritora.

Con la idea de la memoria como ejercicio ingrato, cuando la reflexión se adelanta 'a la acción para estorbarla', aborda Castellanos la escritura de Elena Croce(5),quien pertenece a un 'clan' cuya 'actitud ante el arte... era siempre la de un mecenas'. Separarse de lo inmediato lleva a la escritora italiana, dice Castellanos, a evitar el "yo" en su obra y a afilar la desconfianza frente al mundo aristócrata de sus antepasados.

Termina Rosario Castellanos su rápida excursión en el espejo de tiempos y espacios diversos con una comparación entre el amor y el sarampión, en referencia todavía a Croce y el mundo que describe.

Así como se sucedieron vertiginosa pero nítidamente las imágenes de cinco escritoras de tres siglos diferentes, así transcurre la lectura de esta colección de ensayos, aderezados con ironía y buen humor.

*Castellanos, Rosario, Mujer que sabe latín..., Fondo de Cultura Económica, México, 1997. Disponible en la biblioteca Juan Rulfo, UNAM-ESECA, 55, promenade du Portage, Hull, Quebec, Canadá.

** (México, 1925-1974). poeta, novelista y ensayista. Su obra completa está publicada en tres tomos por el Fondo de Cultura Económica, México, 1996. Varias de sus obras se encuentran en la biblioteca Juan Rulfo.

1. Santa Teresa de Ávila. Autora española mística del siglo XVI. Primera mujer que recibe el título de Doctor en la Iglesia Católica. Entre sus obras se encuentran El camino a la perfección y El Castillo interior.

2. Sor Juana Inés de la Cruz (Juana de Asbaje). Poeta, dramaturga y ensayista mexicana del siglo XVII. A fin de dedicar su vida al conocimiento y a las letras, Juana Inés ingresó en el convento de San Jerónimo en Puebla, México. Ahí reunió una biblioteca de 4 000 volúmenes, realizó experimentos científicos y escribió poemas y obras de teatro religiosos y seculares. Sueño Primero ha sido una de sus obras más estudiadas.

3. Virginia Woolf. Novelista, crítica literaria y editorialista inglesa de principios del siglo XX. Fundadora junto con su esposo Leonard Woolf de la editorial Hogarth Press. En su ensayo Una habitación propia, describe las dificultades a las que se enfrentan las mujeres escritoras.

4. Simone de Beauvoir. Novelista y ensayista francesa que en este siglo transcribe en forma literaria los temas del movimiento filosófico del Existencialismo. Su obra más conocida es quizás El segundo sexo, ensayo en dos volúmenes en donde aborda el mito del "eterno femenino".

5. Elena Croce. Escritora italiana que comienza a publicar su obra en la década de los años treinta en este siglo. En La infancia dorada y Recuerdos familiares, describe a la gran burguesía católico-liberal de esa época.